Por favor, póngase en contacto con Jesús Chávez jchavez@centrolegal.
PARA LA LIMPIEZA INMEDIATA: 17 de Abril de 2020
Contacto (números no para distribución):
Juan Prieto, Alianza de Justicia Juvenil de Inmigrantes de California (510) 414-0953, jprieto@ciyja.org
Ambar Tovar, United Farm Workers Foundation (661) 699-6672, atovar@ufwfoundation.org
A medida que las huelgas de hambre se extendieron en detención, los inmigrantes detenidos, los defensores de la comunidad denuncian la inacción del Gobernador
La presión comunitaria y la huelga de hambre en curso en Mesa Verde empujan al ICE a liberar al anciano por temor a la exposición a COVID19, mientras que otros siguen en riesgo; La presión aumenta sobre Gov. para detener la expansión de la detención de inmigración y las transferencias de cárceles y prisiones a la detención de ICE.
BAKERSFIELD, CA— A medida quecrece la amenaza de COVID19 en los centros de detención de inmigración en todo California, una creciente marea de huelgas de hambre dentro de los centros de detención y protestas comunitarias está ejerciendo una creciente presión sobre el gobernador de California Gavin Newsom para que tome medidas ejecutivas para salvar vidas.
Como muchos tres centros de detención en todo California se han unido a una huelga de hambre que comenzó la semana pasada en un dormitorio de mujeres dentro del centro de detención de Mesa Verde en Bakersfield, se han iniciado protocolos de seguridad de salud exigentes para responder a COVID-19. Los esfuerzos sostenidos en todo el estado se han producido cuando el centro de detención de propiedad privada Otay Mesa, a solo 250 millas al sur de Bakersfield, se convirtió en el centro de detención con el mayor brote de COVID-19 en un centro de detención en los EE.UU.
Aunque los huelguistas de hambre exigen que todos sean liberados inmediatamente para responder a la pandemia, sus preguntas inmediatas incluyen: poner fin a la transferencia de personas de las cárceles y a los centros de detención, que todo el personal que trabaja con ellos usa artículos preventivos como máscaras y guantes, que ICE proporcione pruebas COVID-19 para aquellos que experimentan síntomas, y que se proporcione asistencia médica en el lugar a quienes lo han contratado.
A partir de esta mañana, la huelga y la creciente presión de la comunidad en el exterior ha dado lugar a la liberación de al menos un hombre cuya salud y edad lo colocan en alto riesgo de morir en caso de que contraiga el virus. Luis Alberto Escobar, el hombre a liberar tan pronto como se pone en unión, hombre de 63 años que recientemente se sometió a una cirugía de la columna vertebral que lo dejó con un movimiento físico limitado y sufre de incontinencia, presión arterial alta y dificultad para respirar.
Sin embargo, los huelguistas dicen que esto no es suficiente. Cerca de 100 organizaciones de todo el estado han firmado una carta que los huelguistas redactaron pidiendo al gobernador Gavin Newsom y al fiscal general Xavier Becerra, que tiene el poder de supervisar los estándares de atención en la instalación, que tomen medidas.
Uno de los delanteros, Marcos Alejandro Reyes, dice que es una súplica por sus vidas. “Tengo miedo de enfermarme”, dijo el . “Estamos encerrados aquí juntos, hacinados, sólo empacados. Donde estoy ahora, hay 100 personas en una habitación grande. Tratamos de cuidarnos el uno al otro, y tratamos de limpiar, pero hay poco que podamos hacer. Por favor, ayúdanos a salir de aquí.”
Reyes tiene cirrosis que debilita su sistema inmunológico. También tiene várices esofágicas, que podrían romperse y sangrar debido a los síntomas respiratorios de COVID-19.
Anteriormente, más de 150 organizaciones esbozaron la autoridad amplia del Gobernador para salvar vidas, y le pidieron que detuviera un controvertido intento de las corporaciones privadas de expandir la detención migratoria en el estado, y también para detener las transferencias de miembros de la comunidad de la custodia estatal o local a la custodia de ICE.
ICE priva sistemáticamente a decenas de miles de inmigrantes de la libertad, creando un sistema de detención en todo el país que no existía hace unas décadas. La detención está plagada de negligencia médica y ha visto múltiples muertes por negligencia médica incluso antes de COVID19. Miles de médicos han instado a liberar a las personas de la detención de inmigrantes, cárceles y prisiones, dado que las condiciones de confinamiento intrínsecamente hacen imposible el distanciamiento social.
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